Primeros auxilios

Cómo curar quemaduras en niños

4 min.

Las quemaduras son las lesiones que se producen por contacto directo o indirecto con calor, corriente eléctrica, radiación o agentes químicos. La quemadura producida por líquido caliente (escaldadura) es la que sucede con mayor frecuencia en niños y niñas.

Durante los primeros meses de vida las quemaduras en niños suelen producirse en el baño o al tomar alimentos muy calientes. Cuando el niño comienza a desplazarse, y aumenta su curiosidad, las posibilidades de que ocurra una quemadura se incrementan, por lo que la edad de mayor riesgo es entre los 12 y los 24 meses.

El hogar, y especialmente la cocina, es el principal lugar donde se producen las quemaduras en niños.

Recordad que la piel de los bebés y niños es más fina que la de los adultos, por lo cual se quema a temperaturas inferiores y con mayor profundidad. 

Tratamiento para quemaduras en niños

Si la hay, retiraréis la ropa que cubre el área quemada si no está pegada a la piel (si está adherida, tendrá que quitarla el personal sanitario). También lo haréis en caso de quemadura química.

A continuación, enfriaréis la piel aplicando agua fría debajo del grifo, durante 10-20 minutos. Igualmente actuaréis así con la mayoría de quemaduras químicas, salvo con algunas sustancias que se agravan con el agua (como el fenol, presente en aceites esenciales), pero prolongando el enjuagado hasta los 30 minutos. En ningún caso debéis utilizar hielo sobre la quemadura del niño.

Si las quemaduras son de reducido tamaño y solo han causado el enrojecimiento de la piel, tras la aplicación de agua fresca y una vez pasada la fase aguda, aplicaréis una crema hidratante (puede contener aloe vera, pero nunca pondréis una hoja de aloe vera directamente sobre la quemadura). En cualquier otro caso, se debe consultar con el pediatra o acudir al hospital, especialmente si la quemadura es extensa o ha afectado la cara, las manos, los pies o la zona de los genitales. 

Si las quemaduras en los niños forman ampollas

En el caso de que las quemaduras en los niños formen ampollas, debéis procurar que no se rompan y esperar a que el médico decida la mejor forma de tratar cada caso. Si se rompen, las lavaréis con agua y jabón y cubriréis con una gasa estéril que no apriete. Nunca deben utilizarse cremas para quemaduras (si no lo indica un sanitario), pasta dentífrica, mantequilla, ni remedios caseros de ningún tipo.

Bebé tocando un horno

Primeros auxilios en quemaduras

Una vez atendáis al niño o niña y le realicéis los primeros auxilios para quemaduras, debéis intentar clasificarlas para poder valorar su gravedad y determinar si debéis trasladarlo al hospital para que reciba ayuda profesional. Para ello, debéis tener en cuenta el tamaño, la profundidad y la localización de la lesión.

Actualmente la gravedad de una quemadura se designa como:

  • Superficial (primer grado). Solo afecta a la capa más externa de la piel.
  • Espesor parcial superficial (segundo grado superficial) y espesor parcial profundo (segundo grado profundo). Además de a la capa superficial, afecta a parte de la siguiente capa de piel.
  • Espesor total (tercer grado). Afecta a todas las capas de la piel y a terminaciones nerviosas.

Qué hacer en caso de quemaduras de segundo grado en niños

En quemaduras importantes, después de quitar la ropa que pueda sacarse fácilmente si no ha quedado adherida, sumergid la quemadura del niño en agua fría. También hay que procurar que el niño sea visitado por un profesional médico, lo antes posible.

En el caso de que la ropa del bebé prenda fuego, lo más recomendable es hacerle rodar sobre el suelo o envolverlo con una manta para que las llamas se apaguen por la falta oxígeno. Nunca hay que quitársela antes de que esté completamente apagada, pues eso avivaría el fuego. Acto seguido, llamad a una ambulancia. 

Cuando las quemaduras son muy extensas y graves, envolved al niño con una sábana limpia, y abrigadle con una manta para salir urgentemente hacia el hospital, poniéndole compresas frías en el trayecto.

En quemaduras en niños causadas por sustancias químicas, quitadle la ropa y lavad la zona con abundante agua al menos durante veinte minutos. Después, se recomienda cubrir la quemadura con una gasa o una sábana limpia y acudir a urgencias, sin olvidar llevar el envase o la etiqueta del producto que la ha causado.

Si el bebé se quema la boca por un biberón demasiado caliente, ponedle boca abajo para que expulse la leche, después, lavaréis su boca con agua fría y acudir a urgencias

Quemaduras solares en niños

Los remedios para quemaduras del sol en niños más adecuados serán siempre los hábitos preventivos y de protección solar. Por ese motivo, los y las pediatras recomiendan protegerse en la sombra, evitar las horas punta del sol y usar prendas adecuadas. Para evitar las quemaduras solares infantiles, será muy importante también la aplicación de crema para prevenir quemaduras solares o fotoprotectores a partir de los seis meses. Debéis aseguraros de que estos productos protejan totalmente a los niños frente a la radiación UVB y UVA.

En caso de quemadura de sol, llevad al niño a un lugar fresco, fuera del alcance de los rayos solares. Duchad al niño en agua fresca y sin jabón para no irritar más la piel, y al secarlo no frotéis la piel, sino dadle suaves golpes con la toalla. 

Para paliar el dolor, podéis aplicar compresas húmedas sobre la zona afectada. Y cuando la rojez de la piel empiece a disminuir se puede aplicar una crema hidratante.  Sobre todo, aseguraos que el niño bebe mucha agua y está bien hidratado.

Para quemaduras de sol graves o extensas, llevad al niño a urgencias. 

Si te interesa saber las claves para disfrutar de tu embarazo mes a mes y conocer cada etapa de desarrollo de tu bebé.

¡Suscríbete!