Esta etapa del desarrollo del bebé está marcada por el gran desarrollo del lenguaje y de la interacción social, como ya empezaba a manifestar en la etapa entre los 12 y 18 meses.
Sus características principales
Desde el punto de vista motor, el bebé ya será muy ágil. Correrá, trepará, iniciará el salto y le gustará jugar con juguetes de ruedas y con pelotas. También será capaz de subir y bajar escaleras y de caminar de puntillas. Dominará la dimensión vertical, construyendo torres y las relaciones espaciales, colocando piezas geométricas en los agujeros adecuados. Iniciará el trazo cuando coja un lápiz y manipulará con destreza piezas pequeñas.
Comunicación y lenguaje en el bebé de 18 a 24 meses
En esta fase suele producirse una explosión del lenguaje y comprenderá muchísimas palabras y frases sencillas. De hecho, se puede decir que comprenderá prácticamente todas vuestras indicaciones, siendo capaz de seguir dos órdenes sencillas como “coge la cuchara y llévala a la mesa”.
Utilizará hasta 200 palabras, incluyendo algunas tan importantes como “no” y “yo”. Empezará a unir palabras, construyendo lo que se conoce como “frases-palabra”: con dos palabras construirá una frase sencilla con la que expresarse. También, podría tartamudear de vez en cuando.
El desarrollo en niños y niñas de dos años
La autonomía adquirida es importante y, por tanto, es habitual que las rabietas se intensifiquen y que el bebé quiera hacer las cosas de forma autónoma (como comer o vestirse). Esta autoconciencia y el deseo de autonomía hacen que a veces puedan parecer caprichosos o selectivos con la comida, los juguetes o las rutinas. Por todo ello, suele disminuir y desaparecer también la angustia de separación, mostrando una independencia creciente respecto al adulto. Sin embargo, cada vez será más capaz de mostrar afecto y cariño y de entender empáticamente los sentimientos de los demás.
Conforme van creciendo, los niños y niñas precisarán de más de normas y límites, pero deben ser acordes a su edad y desarrollo.
Juegos y actividades para bebés de 18 meses
Imitará y tendrá cada vez más interés por otros niños y otras personas, iniciando cada vez más juegos conjuntos y juegos rítmicos. El juego es cada vez más complejo, apareciendo el juego simbólico, como por ejemplo dar de comer a los muñecos.
En la etapa de los 18 a los 24 meses, al bebé pueden interesarle juegos, juguetes y actividades como muñecos con accesorios funcionales, para poner en práctica el juego simbólico, juegos de imitación (cocina, taller de trabajo), micrófonos con efectos de sonido, columpios, puzzles, mosaicos, juegos de coordinación manual y pinturas. Probablemente también muestre ya interés por las pantallas, pero recordad que antes de los tres años no es necesaria ni recomendable la exposición a estos elementos.
Como progenitores o cuidadores, es importante que enfoquéis el juego como diversión y no con grandes objetivos de estimulación, pues sus neuronas ya se estimularán ante esta beneficiosa actividad.
Signos de alarma a los 24 meses
Cada niño y niña irá progresando, siguiendo su ritmo y según sus cualidades. No debéis tener prisa. Sin embargo, hay algunos signos que pueden indicar que su desarrollo no sucede tal y como debería.
- No presta atención a lo que se le dice ni a lo que hace.
- No hay juego simbólico.
- La relación con iguales es escasa, con tendencia al aislamiento, o muy agresiva. Desinterés por las relaciones y sin atención conjunta.
- No corre ni chuta una pelota.
- No comprende indicaciones sencillas si no van acompañadas de gestos.
- Ausencia de palabras simples como “pan” o “agua”.
- No sabe pedir comida o bebida.
- Desarrollo de temores invalidantes o de rabietas muy frecuentes o intensas.
